No es tan dañoso oír lo superficial como dejar de oír lo necesario.(Marcus Fabis Quintiliano)

Flotilla, IHH. Free Gaza

| 25.7.10



Stop IsraelIHH, y FLOTILLA

5 comentarios:

Txolarte dijo...

Los diputados del PSOE también se sienten indignados, porque los han tratado, como acostumbra la global política, con su partido incluido.
De aquella ayuda del 0.3%, con pretensiones de llegar al 0.7% de solidaridad, me da al olfato que el 0,3% nunca ha sido tan transparente como el Udaletxe de Bilbo y que en parte se ha gestionado con pocas garantías y demasiada intervención bancaria.
Del 0.7% ni hablamos que estamos en crisis.
Un amigo, me mandó la La maldición de Malinche, para consultarme si se podía solucionar el sortilegio con alguna pulsera del equilibrio, o con alguna petición al santo. Lo he meditado, y le he respondido con el ejemplo del “jodido Mikel” “A veces te sientes Brizna y otras tronco de Roble” pero si hemos de ser transparentes, mi opinión es que repetimos la historia ¡La maldición la sufren los oprimidos! ¡La aprovechan los gobiernos teocráticos!

sonia dijo...

Sí, no tienen para nada ni para nadie, pero !Cuándo lo han tenido!.

Txolarte dijo...

¡Indignados! Porque no les han dejado pasar la frontera con con credencial de diputados.
¿Indignados?
Indignados, están los familiares de los asesinados en el barco.
Indignados, cuando quisieron hacer española a la irreductible Haidar, para que no pudiera volver a su patria.
¡INDIGNADOS!
¿Qué dignidad defendemos? ¿solo la nuestra?

Io dijo...

Hamás prohíbe la lencería femenina en los escaparates de Gaza, según publican por aquí.

Se me hace raro que prohiban esas fruslerías en Gaza tras 4 años de severo bloqueo

Igual no es más que intoxicación de la prensa amarillista... tampoco hay que tomar al pie de la letra cualquier cosa publicada, ¿no?

Io dijo...

Leeré un rato a Wafa Sultan, la socióloga de origen sirio que parece que conoce un poco aquello y a sus gentes.
Wafa Sultan

Como decía Rafael "El Gallo" de Ortega y Gasset, ¡Hay gente "pa´ tóo"!

Y a fin de cuentas, "Las broncas se las lleva el viento, y las cornadas se las queda uno", que es otra muestra del modo que tenía de entender la vida el maestro, "El Gallo."