
El perro ladra, el hombre habla, o igual es al revés.
Son signos visibles que no solo involucran gestos faciales o corporales; los ladridos, los sonidos, las palabras, los jadeos, aullidos, ........ , nos dan otras pistas, nos están transmisitiendo emociones y fustraciones. Y en esto, el hombre igual que el perro.
Cuando oimos hablar de " ........ . el perro de Paulov ..,.... ", pensamos que Paulov es una mala persona, y le calificamos de perro, cuando en realidad Paulov es una persona que tiene un perro.
Así somos de perros las personas., a las que se nos puede bien aplicar la teoría del conductismo, es decir explicamos y predecimos la conducta y somos capaces de anticipar las consecuencias de las mismas, y por ende MODELAMOS nuestra forma de comportarnos. Igualito que los perros.
El hombre piensa, el perro asienta, o igual es al revés.
O sea, que las personas, como los perros, no tenemos una personalidad innata, es la experiencia de vida la que le da una forma de ser y actuar, y ..........
Ocurre que esta semana pasada, han salido los perros a pasear, y unos perros han ladrado y otros perros han hablado, pero al fin y al cabo todos perros, y alguno hasta coronado.
Y yo a picomil metros de altura, me cago en todos los perros, PORQUE ENTRE PERROS de dos patas ANDA EL JUEGO.